La verdad es que la primera impresión fue de subidón máximo, pero esto fue debido a que resultó que habíamos aparcado en la jodida puerta, y además sin darnos cuenta! (minipunto para Bert).
Respecto a la impresión que me causó el local(antes de ir al baño y comprobar que tenían mas mesas) un poco pequeño, pero bien repartido, y con unos cuadros de Nueva York, como no, que son mi debilidad.
-Carta
Clara y concisa, sin demasiados lujos, pero esto es una hamburguesería, señores, no "El Bulli".
-Cantidad
Llegados a este punto, hay que decir que no tenía mucha hambre, y que me pedí la versión pequeña(160 gramos), lo cual causó cierta risa entre los demás críticos... pero vi y probé una de las grandes, y el tamaño es MUY GENEROSO, pero sin llegar a ser tosco y abrumador, lo cual se agradece.
La jarra de cerveza también generosa, aunque eso no era medio litro...
-Calidad
Como ya ha señalado Virginia, impresionante grado de fidelidad al deseo del cliente(poco hecho, al punto, muy hecho). Carne jugosa, sabores bien combinados, en especial en la brooklin, que para la próxima vez será mi elección.
Mención de honor a las patatas fritas, deliciosas, aunque poco abundantes.
-Personal
Muy amables en general, y detallazo la llamada antes de quitarnos la mesa. Otra vez destacar el respeto al punto de la carne.
-Otras consideraciones
+500 puntos por haber sido recomendado por Cámara. Soy así de objetivo
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